La importancia de una correcta hidratación para mejorar el rendimiento deportivo
La hidratación no solo es importante para mejorar el rendimiento deportivo, sino que es esencial para la salud. La sensación de sed se presenta cuando ya estamos deshidratados y nuestro rendimiento ya ha disminuido, por lo que debemos estar hidratados durante todo el día y especialmente antes, durante y después de realizar ejercicio.
La pérdida de líquido corporal que sufrimos con la práctica de ejercicio disminuye una buena regulación cardiovascular y afecta al rendimiento físico. Puede llegar a provocar fatiga, dolor de cabeza, malestar general e incluso calambres musculares. En condiciones normales la orina y el sudor son los mecanismos que utiliza el cuerpo para eliminar líquidos y toxinas. Estas pérdidas naturales de líquido varían dependiendo del tipo de alimentación, el nivel de actividad diario, el clima, la temperatura y la ropa. En dichas condiciones la ingesta de agua, de 2 a 3 litros diarios, seria la cantidad recomendada para tener un hábito de vida saludable.
Sin embargo, para cuando se practica ejercicio físico existen estudios en los que tener a disposición una variedad más amplia de bebidas q, además del agua, incrementamos su ingesta un 50%. Otro tipo de bebidas pueden ser los refrescos para deportistas, zumos de frutas y hortalizas… las bebidas con una solución de hidratos de carbono y electrolitos como el sodio. Es importante informarse bien de la composición de las bebidas para deportistas y asegurarnos que nos servirán para recuperar especialmente los minerales que perdemos con la pérdida de líquidos que se produce en nuestro organismo.
Algunos alimentos que ayudan a mejorar el rendimiento deportivo
Quinoa: se trata de un pseudocereal con el doble de proteínas que uno tradicional, grasas “buenas”, carbohidratos que ayudan en el proceso digestivo, minerales y vitaminas B, C y E. Además cuenta con los ocho aminoácidos esenciales para generar músculo y recuperarse de los entrenamientos.
Bayas: aportan vitaminas A, C y E con funciones antioxidantes, por lo que, además de disminuir el riesgo de padecer ciertas enfermedades, ayudan a conservar la fuerza muscular con la edad. Algunas de las más conocidas son las moras, las frambuesas o los arándanos.
Vegetales crucíferos: como el brócoli, la col o la coliflor con grandes concentraciones de fibra y antioxidantes y llenos de vitaminas y minerales.
Plátano: aporta electrolitos naturales y el potasio necesario para evitar calambres o espasmos musculares. Además su fibra y azúcares naturales son una inyección instantánea y sostenida de energía.
Salmón: con un alto contenido en omega-3, esta proteína ayuda a reducir inflamaciones y es muy saludable.
Pasta de harinas de grano, sin refinar: fuente de carbohidratos para cargatse de energía.
Nueces: fruto seco que nos aporta proteínas y grasas saludables que ayudan a equilibrar el azúcar en sangre cuando se combinan con los hidratos de carbono. Son fuente de fibra y magnesio que facilita la entrega de calcio y potasio a los músculos, pero se deben consumir de manera moderada (3 o 4 al día) porque son altamente calóricas.
Una alimentación ordenada para la mejora del rendimiento deportivo
Llevar una dieta adecuada para nuestro ritmo de vida, nuestro organismo y la actividad física diaria que realicemos es esencial. Además como ordenemos nuestra alimentación afectara a nuestra respiración, nuestro rendimiento y nuestro descanso. Es por ese motivo que para la mejora del rendimiento deportivo la alimentación, la hidratación, la respiración y el descanso son factores esenciales. Por ello Respirfix trabaja en estas dos últimas ayudándonos a respirar mejor y en consecuencia a mejorar el rendimiento deportivo tanto mientras practicamos deporte como durante nuestro descanso.